Por Jonathan Vargas

El sábado 29 de julio 2017 llevamos a cabo el monitoreo del charran mínimo (Sternula antillarum) en Punta Banda, Ensenada.

En visitas pasadas para el monitoreo de aves, hemos identificado varios individuos que portan marcas, y en un esfuerzo para poder determinar el origen de ellos, hemos estado visitando la colonia de anidación en Punta Banda.

Cabe mencionar que esta colonia ha sido monitoreada desde 2014 por Pro Esteros A.C.; sin embargo, es poca la información que se tiene sobre la conectividad de los sitios de parada o invernada en su ruta migratoria.

Por lo anterior, el sábado pasado miembros de Terra Peninsular A.C. visitamos la colonia para intentar capturar aquellos individuos con marcas, pero sin éxito.

Desde nuestras primeras visitas al sitio en esta temporada hemos documentado al menos 15 individuos marcados y gracias al trabajo en colaboración con investigadores de Estados Unidos se ha podido determinar el origen de al menos 1 individuo adulto proveniente de otras colonias de anidación en el estado vecino del norte (California, Estados Unidos), y otros más que están en revisión con otros colaboradores.

A pesar de los esfuerzos de protección que se han realizado anteriormente en la zona, las amenazas más fuertes que enfrentan estas aves durante la época reproductiva son el disturbio humano y el tráfico de vehículos motorizados de manera desmedida y sin ninguna regulación.

Esto resalta la importancia de continuar con las acciones de conservación y promover nuevas estrategias en coordinación con otras instituciones afines y órganos de gobierno pertinentes.

El charrán mínimo es una especie protegida a nivel federal en México y está enlistada en la NOM-059-2010 en la categoría de protección especial.